miércoles, 12 de diciembre de 2007

´LA MISIÓN... CAPÍTULO III

- IMBÉCIL, FRACASADO, ME CAGASTE LA VIDA.
- Pero pará negra, qué mierda querés que haga yo.
- Cómo qué quiero que hagas pelotudo, quiero que te consigas un laburo como la gente, que traigas guita, que me toques, que me la metas, forro. Yo acá encerrada todo el día como una esclava lavando tu mierda y vos de cabaret en cabaret, en vez de cogerte a tu señora como Dios manda.
- Pero qué decís mi amor, si sabes que yo en la vida fui a un cabaret.
- Sos un hijo de puta, no tenés cara. Basta, me cansé, estoy harta de vos, de tu trabajo, de que desaparezcas una semana y no me avises, de que no me embaraces, de no tener un puto vestido lindo para ponerme... Te vas, andate, no te quiero ver más en mi vida y no se te ocurra venir, porque llamo a la policía y te hago meter preso...

Madrid estaba nublado y helado. Por la ventanilla del Ford Negro miraba las calles de la capital de la Madre Patria, como un zombie, mientras mis pensamientos se recluían en aquella triste noche de verano, en mi Lanús natal. Cuando la voz de Pascu me despabiló.

- Llegamos señor, este es su hospedaje, aquí le dejo la dirección de mi casa. Yo estoy todo el día allí, así que si necesita auto, no tiene más que buscarme. Adiós.

Observar ese hotel de mala muerte, me devolvió a la realidad. Ahora sí estaba seguro que esto me lo había reservado el jefe. Siempre fue un tacaño y la pocilga que me había reservado, era definitivamente su estilo.
Me presenté en la conserjería del hotel y debo admitir que, gracias a que pude contener la flema que subió a mi boca como un torrente, no vomité en la cara de ese cuerpo obeso y deforme que se presentó ante mis ojos. Aquella bestia, que hubiera producido espanto al mismísimo Dante, vestía con un enorme vestido floreado, tenía ruleros en su enorme cabeza y pelos por todo su cuerpo. El único dato que me confirmó que era humano y mujer fue su nombre: Josefa de La Concha Ramírez.

- Fernández... si si, acá esta, habitación 17, tiene vista a la calle, lo mejor del hotel caballero. ¿Supongo que ya estará enterado de como es el servicio aquí no?
- La verdad que no, si es tan amable de decírmelo, dije yo tratando de no mirarla a la cara, por el asco que me daba.
- Bueno, aquí no hay ni desayuno, ni almuerzo, ni cena, si quiere algo de comer, me lo hace saber y yo se lo preparo, cobrándole un adicional, naturalmente. La regadera sólo tiene agua fría y por supuesto tiene prohibido ingresar con mujeres a este establecimiento, de buena reputación.
- Como usted diga Doña Josefa, dije yo, para que esa conversación infernal se acabara de una buena vez.

Si esa cueva oscura y con olor a meo, era lo mejor del hotel de doña Josefa, no me quiero ni imaginar cómo habrán sido las otras. Mi pequeña morada de Madrid contaba de una mesita destruida, una cama hecha mierda, literalmente, por el olor que despedía y una mugrosa mesita de luz con un velador desvencijado.
Me dispuse a desempacar la poca ropa que llevaba en mi maleta, arrojando, esta, en la cama, ya que no había repisa, y salí a hacer mi primera caminata por Madrid, para pensar de qué forma iba a poder cumplir mi misión.
Lo primero que tenía que hacer era conseguir un arma o dos, pregunté en la calle la dirección de una armería y me dirigí a ella.
Cuando entré a aquél negocio de armas, la bienvenida del dueño del local, me sorprendió:

- Buenos días tuquito, lo estaba esperando.
- ¿Cómo que me estaba esperando?
- Como escucha, no me pregunte por qué, pero yo estaba enterado de su visita y por supuesto de su misión. Escúcheme y no haga preguntas. Hoy a las doce de la noche vaya a esta dirección. Es fácil, no tiene más que preguntar por la Plaza de Toros. Allí lo esperarán dos personas que le darán las primera indicaciones para llevar acabo su misión. Tenga cuidado, lleve estas dos 45 y sobre todo no confíe en nadie, ni siquiera en mi... Ahora si me disculpa debo cerrar, ya nos volveremos a ver.


Continuará...

Tito.-

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno. Me gustó mucho la primera parte, medio fuerte pero pobre mina! turrito tuquito eh
Que siga.

Anónimo dijo...

A mí la primera parte fue lo que más me gustó. Aunque cómo pintás a Josefa también está muy bueno.

Anónimo dijo...

A mí también me gustó, la primera parte con un lenguaje que contiene un contenido "explicit lirics", pero bien manejado. vamos por la cuarta...

Anónimo dijo...

CUÁNDO SIGUE???

Anónimo dijo...

Entre hoy y mañana subo el capítulo 4, perdonen por la tardanza, pero la facu me comio la cabeza estos días
Jose gracias por ller el blog, seguí haciendoló
saludos