viernes, 23 de noviembre de 2007

El dios Google

Está muy buena esta nota que leí ayer en Página/12 sobre todo por el punto de vista del que parte Cassin. También, pensé, puede ser muy útil para el Sr. Damián y su tesina. Sus comentarios al respecto pueden ser fructíferos.
Doli

UNA VISION FILOSOFICA DEL INSTRUMENTO MAS PODEROSO DE INTERNET

La francesa Barbara Cassin es filósofa y desde ese saber diseccionó el popular buscador. A partir de sus características y el análisis del discurso de sus creadores, la investigadora advierte sobre la amenaza que significa Google y la falacia de su supuesta democracia.
Por Pedro Lipcovich

¿Qué tiene en común el sombrío presidente George W. Bush con los brillantes, informales jóvenes que crearon el buscador Google? Mucho, según Barbara Cassin, directora de investigaciones en filosofía y filología del equivalente al Conicet en Francia. Desde su perspectiva filosófica, la investigadora encaró el estudio del popular buscador, y terminó por escribir un libro: Google-moi: la deuxième mission de l’Amérique (“Googléame: la segunda misión de Estados Unidos”). La “primera misión” es la que comanda Bush. A partir de un examen de las características técnicas del buscador, de las particularidades de la empresa que lo rige y del análisis del discurso de sus creadores, Cassin señala amenazas a la privacidad de los usuarios, denuncia la función de la publicidad y cuestiona una distorsión esencial de la democracia que subyacería a los criterios empleados por Google. Sus afirmaciones son a menudo controversiales, pero dejan un saldo inquietante: tal vez Internet –tan comparada con la borgeana Biblioteca de Babel– ha venido a ser, en efecto, una biblioteca infinita: sólo es accesible una cantidad finita de textos, los que ordene su Bibliotecario, pero ¿si el Bibliotecario resulta ser indiferente y superficial? Barbara Cassin visitó la Argentina, donde disertó en la Biblioteca Nacional y dialogó con Página/12.
Como suele suceder en la historia de la filosofía, la indagación de Cassin empezó por una ingrata experiencia personal: “‘Yo la conozco a usted, la he googleado...’, me dijo una vez un asistente a un congreso, pero él había encontrado tres Barbara Cassin. Una era una oftalmóloga norteamericana, autora de un Diccionario del ojo, siendo que yo escribí un Diccionario de lo intraducible; otra, una teniente de navío neozelandesa, que para colmo estuvo conmigo en una comisión de reconciliación en Africa del Sur. No era del todo fácil discernir entre las tres”. (El Google permite constatar que la fama de Cassin, como crítica del Google, le ha permitido escalar en el ranking del Google: hoy, si bien la oftalmóloga pervive en el sexto lugar, la teniente de navío ha quedado totalmente relegada.)
De todos modos, “lo que me decidió a escribir el libro fueron los dos lemas elegidos por Google. El primero es: ‘Nuestra misión es organizar toda la información del mundo’”. El segundo fue: “No seas malvado” (don’t be evil, que este año fue reemplazado por el más neutro: “Búsqueda, publicidad y aplicaciones”). El primero de los lemas, según Cassin, “conlleva la idea de que la web es orgánica, natural. Sus fundadores, en una entrevista en la revista Playboy, cuando les preguntaron qué es la web, contestaron: ‘Ustedes son la web’”. Y Cassin recurre a la filosofía: “Hay una inmanencia en la web, ese ‘ustedes’, y una trascendencia, un Dios de la web, que es el Google. Este Dios, que organiza la web, puede irrumpir en cualquier momento para cambiar la modalidad de organización, redefinirla a partir de nuevos hechos, y efectivamente lo hace”. Por ejemplo: “Si alguien tecleaba ‘big feet’ –‘pies grandes’– aparecía en primer lugar una zapatería especializada en calzado para pies grandes. Eventualmente Google cambió sus parámetros, esa referencia se perdió y la zapatería empezó a caer en la ruina. Hasta que ese comerciante decidió comprar publicidad en Google”.
Lo cual puede abordarse desde aquel segundo lema: “Una de las formas de ‘no ser malvado’ que tiene Google es garantizar que nadie puede comprar su rango de página. Pero eso no le impide ganar el 99 por ciento de sus ingresos mediante la publicidad que aparece en los márgenes. Así por ejemplo, si, a fines de 2005, uno tecleaba banlieue (‘suburbio’), aparecían datos y opiniones sobre los disturbios y el maltrato a los inmigrantes en las afueras de París pero, a la derecha, bajo el rótulo ‘Para saber algo más’, aparecía el enlace a un sitio de Nicolas Sarkozy, el actual primer ministro: él había pagado por estar en ese lugar”.
Volviendo a la “misión” que propone el primer lema, Cassin desemboca en la idea que da título a su libro: si Google es “la segunda misión de América”, la primera es la de George W. Bush: “Tanto Google como Bush dicen promover la democracia, asegurar el derecho a la información y al saber, apuntar a lo universal: pero en sus discursos subyace la apropiación de todos esos bienes por intereses determinados. Aquel ‘no seas malvado’ de Google puede vincularse con la ‘guerra del Bien contra el Mal’ que exige Bush”.
Cassin recordó que los creadores del Google, Larry Page y Sergey Brin, “eran dos estudiantes de la universidad de Stanford: a partir de la crítica a los buscadores como el Altavista, que daban respuestas redundantes o idiotas, se les ocurrió priorizar, no los enlaces que salen de un sitio web, sino los que llevan a él. Y refinaron este criterio en un algoritmo, que permanece secreto y que en realidad está registrado por la Universidad de Stanford, que se los otorgó en concesión hasta 2011: la fecha de vencimiento para esta concesión que constituye su fortuna los obliga a diversificarse, a buscar permanentemente otros recursos, y así la empresa Google Inc se convirtió en una inmensa plataforma de servicios, que no para de comprar otras empresas, como YouTube en 2006. Las acciones, que cotizan en Bolsa desde 2005, pasaron de valer 15 a 100 dólares el mismo día de su lanzamiento; en 2006, cotizaban 460 dólares, hoy están en 600. En 2006, el volumen total de negocios superó en un 79 por ciento al del año anterior.
Según Cassin, “para entender el Google, me sirvió saber filosofía griega: el motor general de búsqueda, que recorre toda la web visible en un mes, cumple la primera función del logos, que es recolectar datos. La segunda función es elegir, clasificar, lo que en el Google se llama indexación. Pero esta indexación se efectúa por el análisis de las demandas de los navegantes, y esto tiene varias consecuencias”, no todas deseables.
“Por de pronto, Google pone, en las computadoras de los usuarios, cookies que guardan las búsquedas efectuadas: esto permite que Google sepa qué respuestas ha preferido cada uno, en forma de otorgarle la que habitualmente lo satisface. Pero esto puede traer grandes problemas de seguridad para la información privada de las personas.” Además, “si el usuario instala las herramientas que Google ofrece para el escritorio, otorga acceso a todo el contenido de la máquina”. Y “si además utiliza gmail, da acceso a su correspondencia. El primer cuestionamiento a la privacidad del correo electrónico vino de una chica que le había pedido a su madre la receta de una torta y la respuesta le llegó junto con varias publicidades de libros de recetas: ‘Alguien lee lo que le escribo a mi mamá’, protestó. ‘Pero el que lee es sólo un robot...’, argumentó la empresa Google”.
Claro que los mayores peligros no vienen de las recetas de cocina. Según Cassin, Google habría cedido al gobierno de la China perfiles de sus usuarios en ese país, “lo cual permitió identificar e incluso arrestar a disidentes”. Lo seguro es que “si, en un país que no sea China, uno escribe en el Google ‘Tiananmen’, obtendrá datos sobre la represión a manifestantes en esa plaza de Beijing, en 1989, que dejó centenares de muertos: pero, si lo escribe en China, no obtendrá más que pacíficas referencias urbanísticas a la plaza”.
Pero el cuestionamiento central de Cassin –donde realmente emerge la raíz filosófica de su planteo– es a la noción de democracia implícita en el algoritmo de Google: “Google se presenta como el campeón de la democracia cultural, que haría posible un acceso generalizado a la información, pero en verdad no es democrático: para Google, un clic, un enlace, es un voto. Pero la suma de clics no hace un pueblo, es decir: no hace un mundo en común. La democracia requiere lo que los griegos llamaban una paideia: en este caso, una manera de instruir a la demanda, ayudarla para que pueda encontrar lo mejor. No puede limitarse a dar una información cuantitativamente adecuada”.

Fuente: Página/12

6 comentarios:

Anónimo dijo...

En lo que repecta a Internet a mi se me genra siempre una contadicción. Aunque todo lo que se dice en esta nota es cierto, Internte y Google en especial rompe con la piedra fundacional del capitalismo, que es la propiedad privada. Esta idea siempre me hizo ruido y no logro hacer me de una respuesta lógica sonre el tema. O sea sin duda que lo que dice esta filósofa es cierto, no es que Google es el bastión de la democracia ya que si vos pagas apareces primero en la lista de resultados, pero por otro lado, googlenado uno accede a documentos o lo que sea que tal vez le serían imposble de otra manera. Es difícil la verdad, por un lado Internet es una, tal vez la más grande, forma de sumisión que nos impone el sistema y por la otra un canal de expresión único en la historia de la humanidad, qué paradoja no?
Muy bueno Loly
saludos

Pd: Desvirtuando un poco, ustdes se imaginan lo que podran ver la gente de google de todo el mundo, si alos simples giles como nosotros, nos dejan usar el google earth?
Yo por las dudas a veces miro para arriba y les muestro el culo ja

Anónimo dijo...

Una vez más coincido con el amigo cuya 10 cuadras nos separan. El impacto de Internet aun no se puede comprobar. Es cierto que es la mejor herramienta del sistema para adormecernos y seguir dominándonos a su antojo.
Pero para mí en ese sistema hay una falla (la cual expuse en pleno final de políticas cuando estaba haciendo agua para todos lados y se la dije al profesor para no quedarme callado). Esa falla del sistema es que en mi caso personal por ejemplo, el año pasado me baje un total de 1000 discos, mas 3.000 comics, mas varios DVD enteros y muchísimos libros. El tema es que es la misma gente quien sube esas cosas para que yo me las pueda bajar, en el caso de los comics, alguien se toma su tiempo para escanearlos enteros para que yo pueda acceder a ellos, generándose una especie de comunismo virtual lo que a las empresas les generan perdidas millonarias. Si tomamos los discos que yo me baje gratis, los multiplicamos por un promedio de masomenos $20 yo hubiese gastado $20.000 pero no!!! Pero accedí totalmente gratis, gracias a que alguien lo quiso compartir.
Se me generan las mismas contradicciones que tito en el caso de que si bien por un lado es una herramienta de control y se pierde la privacidad, también ha modificado radicalmente nuestra vida, para bien y para mal. Podría estar horas y horas enumerando los beneficios de Internet. Pero prefiero ser un poco más cauto y no dejarme encandilar por su atractivo brillo, lo cual produzca que no genere una postura crítica. Todo lo que se escriba acerca de la red es prematuro. El intento de esta muchacha es valido pero para mi es apresurado. Pero lo que si es cierto que lo que te da por un lado te lo quita por otro. Tengamos en cuenta que es una cuestión de las grandes empresas multinacionales a quienes las perjudica mas en el sentido que son ellos los que tienen que pagar, pero en el caso nuestro, nosotros no desembolsamos un centavo y nuestro BLOG aparece. Por lo tanto a mi personalmente no me preocupa que las empresas lideres sean chantajeadas por Google y desembolsen mucha plata.

Dotas dijo...

El negocio de Google es la Publicidad. Todos los servicios que brinda son excusas para generar más y más tráfico en sus sistemas. Más usuarios, más clics, mayores Ingre$o$. El secreto para fidelizar es que son servicios gratuitos y muy útiles. Muchos son desarrollos propios y en otros muchos casos compra empresas o productos para brindarlos sin costos al "consumidor final". Que te quita a cambio de esta gratuidad? digamos que los datos que vos les das. Ubicacion geográfica, historial de busquedas, palabras clave sobre las que tratas, etc, etc. Todo esto va haciendo un perfil del "navegante" que es la gran clave: Google esta llevando a la Publicidad al grado máximo de personalización. Imaginense esto que se da en internet cuando en no más de una década todos los medios y dispositos sean digitales. Es por esto que se expande Google a otros medios, no porque se le vence la licencia de la patente. Y Google es el más popular digamos, pero todos los grandes de la tecnología y la Publicidad estan yendo a esto. Una última cosa: A Google el poder se lo da cada usuario. Sino lo usaríamos se trataría de dos simples Nerds con una muy buena tesis de doctorado!!! Hay algo más profundo en todo esto: Como el hombre se rinde ante la utilidad de la herramienta y se vuelve adicto a ella. Nadie esta obligado a usarlo, pero como es práctico lo hacemos. Nos sirve. Si una empresita basa su negocio en que aparece primero en Google y de un día para el otro cambian los parámetros de orden de resultados y desaparece de las primeras posiciones, el problema no es de Google sino del tipo que se confió y baso todo en algo que no puede manejar. No esperemos que Google sea democrático,...es un negocio.

Dotas dijo...

Gastón, respecto a lo que decis de la "falla del sistema" yo creo que no es un falla sino la puerta de entrada al mismo. Sino fuera por la piratería de soft, música, películas, etc hoy no estaríamos entrando a este "mundo digital". A través de la piratería se crea el hábito, se incluye a la mayor cantidad de gente posible al nuevo sistema. Obvio que por ejemplo las discográficas pierden, pero redefinen su negocio. Sony BMG debe perder con la piratería, pero Sony entertainmet vende reproductores de mp3. Otro ejemplo:
Hoy en día una PC hogareña con Licencias 100% cuesta entre u$s 1000 y u$s 1500!!! y no te cuento a los pobres diseñadores que necesiten algo de Adobe. Son otros u$s 1000 como para empezar. Si la piratería no existiese, nadie estaría familiarizado con las nuevas tecnologías. De hecho, Internet no existiría.
Respecto a la concentración de la INFO. Si tengo un blog, uso Gmail, busco en Google, uso sus mapas, el Office virtual que sacaron, etc, etc, o como estuve leyendo, en el futuro cada uno podrá tener su historia clínica on line con su password, la info no está en la red, esta en los servidores de Google. Al pasar todo a la red se tiende a vaciar las PC de escritorio (que tiende a desaparecer) y subir todo a la "red", es decir, a los miles de servidores de las grandes empresas tecnológicas. Ahí empieza el debate de la privacidad. Mi Gmail no es mío es de y en Google. Entonces en base a los titulos de los asuntos de cada mensaje ellos ponen Publicidad contextual (adwords). Es invasivo? mmm no se. El que esta escribiendo en la computadora de ellos soy yo. Volvemos a lo mismo. Como me resulta útil lo sigo haciendo. Bueno, de eso viven.

Anónimo dijo...

Dotas, claramente que reproduzco el sistema al bajarme todo eso. El profesor de politicas me contestó algo que es muy cierto. Convengamos que si bien me bajo las cosas gratis sigo reafirmando el imperialismo cultural ya que me bajo SU musica, SU literatura, SUS series, etc. Pero a mí lo que me parece que falla el sistema es en que es la gente misma la que de manera solidaria y democratica pierde horas de su tiempo con un solo objetivo: Compartir. Y eso significa la perdida de millones para muchas compañias. La solidaridad es la causante de la futura quiebra de multinacionales muy poderosas o al menos de ponerlas en jaque. Esto es mi opinión personal, tal vez alguien mas fundamentado me lo pueda refutar. Saludos!!

Anónimo dijo...

Dotas lo que vos decís es cierto y yo ya expresé que lo comparto, en mi anterior post.
Pero hay una cosa que es innegable, Internte, viola la propiedad privada y ahi encontramos una contradiccoón dentro del sistema capitalista, que aun no hay nadie que la haya supido explicar con claridad.
saludos